¿Si te preguntara si deseas tener éxito en la vida, qué me responderías?
¿Te extraña la pregunta?
Seguramente piensas, que todas las personas contestarían que sí lo desean.
Y tal ves eso es lo que afirmaría la mayor parte de la gente.
Sin embargo, al observar su conducta, podríamos ver que no es así, que de una forma u otra, se autosabotean constantemente.
Un gran número de personas le tienen miedo al éxito, es decir, que ante la posibilidad de tener éxito en algún área de su vida, actúa, consciente o inconscientemente, para arruinar la posibilidad de triunfar.
¿Cómo?
Puede ser posponiendo las acciones que deben de llevar a cabo, “olvidándose” de algunas cosas, empezando otros proyectos y no terminando ninguno por falta de tiempo, no encontrando el momento adecuado para empezar, etc.
Cuando tenemos éxito, nuestra vida cambia, porque nosotros cambiamos. Cambian nuestra manera de pensar, de percibirnos a nosotros mismos y a los demás.
Esto puede generar nuevas expectativas que no sabemos si podremos cumplir, cambios en las relaciones con nuestros amigos, etc. y como los cambios con frecuencia nos angustian, elegimos autosabotearnos inconscientemente, consolarnos pensando que lo intentamos y seguir adelante tal y como estamos.
Pero al actuar así, estamos cometiendo un error.
Los cambios siempre se dan, teniendo éxito o no.
Por lo tanto, es mejor enfrentarse a ellos cuando son causados porque nosotros los provocamos con nuestro éxito y cuando aprendemos a disfrutar de ellos.
Encuentra más información en:
Miedo al éxito
Supera el autosabotaje.
martes, 13 de enero de 2009
lunes, 5 de enero de 2009
La crisis y el año nuevo.
Cada vez que empieza un nuevo año, empezamos con nuevos propósitos que esperamos poder cumplir. Sin embargo, al paso de los días, dichos propósitos se van olvidando y caemos en la rutina de todos los días.
Este año, para muchos, empieza con las palabras crisis, problemas y ¡a ver como nos va!
Si empezamos con una actitud negativa, hay más posibilidades de que nos vaya mal.
¿Por qué?
Porque cuando nuestra visión es pesimista, ponemos atención a lo negativo e ignoramos los aspectos positivos.
Además no buscamos ni aprovechamos las oportunidades, porque estamos convencidos de que no vale la pena el esfuerzo, ya que, al fin y al cabo, nos va a ir mal.
Es cierto que estamos viviendo una crisis, pero también es cierto que no a todas las personas les va mal en la crisis y, además, a mucha gente que sí le va mal, cuando pasa la crisis se recupera emocionalmente y económicamente y sigue adelante.
La crisis nos afecta hasta cierto punto. El mayor daño nos lo causamos nosotros mismos, con nuestra actitud y nuestros pensamientos.
Nadie puede limitarnos y devaluarnos más, que nosotros mismos.
Y son nuestros pensamientos los que mantienen vivas, durante meses o años, las emociones que nos lastiman y nos amargan.
Este año nuevo, hazte un regalo, aunque sea atrasado:
Haz tuya la frase de Víctor Frankl: “La única cosa que nunca puedes quitarme es la manera que yo escojo para responder a lo que tú me haces. La última de nuestras libertades es la de escoger nuestra actitud, ante cualquier circunstancia” y enfrenta la crisis con valor, optimismo, perseverancia ante los problemas y confianza en ti mismo y al final, los resultados serán positivos.
Puedes obtener más información en:
Optimismo o pesimismo, una actitud ante la vida.
El origen de las emociones.
Incertidumbre, cambio y estrés.
Como enfrentar una crisis.
Este año, para muchos, empieza con las palabras crisis, problemas y ¡a ver como nos va!
Si empezamos con una actitud negativa, hay más posibilidades de que nos vaya mal.
¿Por qué?
Porque cuando nuestra visión es pesimista, ponemos atención a lo negativo e ignoramos los aspectos positivos.
Además no buscamos ni aprovechamos las oportunidades, porque estamos convencidos de que no vale la pena el esfuerzo, ya que, al fin y al cabo, nos va a ir mal.
Es cierto que estamos viviendo una crisis, pero también es cierto que no a todas las personas les va mal en la crisis y, además, a mucha gente que sí le va mal, cuando pasa la crisis se recupera emocionalmente y económicamente y sigue adelante.
La crisis nos afecta hasta cierto punto. El mayor daño nos lo causamos nosotros mismos, con nuestra actitud y nuestros pensamientos.
Nadie puede limitarnos y devaluarnos más, que nosotros mismos.
Y son nuestros pensamientos los que mantienen vivas, durante meses o años, las emociones que nos lastiman y nos amargan.
Este año nuevo, hazte un regalo, aunque sea atrasado:
Haz tuya la frase de Víctor Frankl: “La única cosa que nunca puedes quitarme es la manera que yo escojo para responder a lo que tú me haces. La última de nuestras libertades es la de escoger nuestra actitud, ante cualquier circunstancia” y enfrenta la crisis con valor, optimismo, perseverancia ante los problemas y confianza en ti mismo y al final, los resultados serán positivos.
Puedes obtener más información en:
Optimismo o pesimismo, una actitud ante la vida.
El origen de las emociones.
Incertidumbre, cambio y estrés.
Como enfrentar una crisis.
Etiquetas:
actitud,
crisis,
Optimismo,
pesimismo,
propósitos
Suscribirse a:
Entradas (Atom)